Sucedió años atras, a los inicios del siglo pasado, en la República Argentina, rechazando el aumento del alquiler que imponían los propietarios de las viviendas a los inmigrantes Italianos. Huelga liderada por mujeres, acompañadas de sus niños de todas las edades, que hacian frente a la policia en las calles de Buenos Aires con las escobas en mano. La muerte de Miguel Pepe de 15 años por la golpiza de la policia, desencadeno una movilización de protesta de más de 15 mil personas. Los políticos, anarquistas y socialistas apoyarón politicamente y materialmente a los huelguistas en sus justos reclamos. A mitad de 1907 el movimiento terminó, la condición de los barrios sublevados peoró y muchos de los huelgistas extranjeros fuerón expulsados del país.
Las mujeres italianas migrantes han afrontado con corage la marginación y descriminación de genero, sin embargo han sabido levantarse y protestar por la reinvindicación de sus derechos; como una huelga en 1904 de las costureras y modistas, por una mejora de sueldo y mejores condiciones de trabajo. En 1919 huelgas del personal de teléfonos por abusivos horarios de trabajo y condiciones inadecuadas. A pesar de todo han sabido trasmitir a sus hijos los valores culturales de su país de orígen Italia, particularmente en lo que concierne a la gastronomía.
El trabajo que desempeñaban en su grande mayoria era el servicio doméstico invisibles, lavanderas, planchadoras, cocineras, camareras, etc. Y otras en las fabricas textiles, del tabaco y en los establecimientos de las confecciones, con un salario inferior al de los hombres. Fué Juliana Lanteri de origenes Piemontese, que lucho a favor del derecho femenino que en 1919 organizó una simulación de voto, presentandose como candidata a diputada, participando cerca de 4 mil ciudadanas; de ahí han pasado 30 años para que el voto de la mujer se convirtiera como un derecho en la república de Argentina.
Del pasado al presente, en la primera década de este siglo (2010), del Nuevo continente al Viejo: Francia, España, Grecia e Italia se preparán el 01 de marzo, hacia un ”día sin inmigrantes”, y de nuevo son las mujeres que toman la iniciativa y levantan la bandera de lucha. No son la s escobas, pero son las mujeres y hombres que realizan las mismas actividades del siglo pasado, son siempre inmigrantes, el revés de la medalla de la migración italiana a fines del 800 e inicio del 900, siempre por el reconocimiento de los derechos ciudadanos y como recuerda la historia en Argentina, se anuncia el apoyo de organizaciones y partidos de izquierda hoy día en Italia.
Una grande protesta contra las leyes descriminatorias de inmigración, de seguridad y de las campañas de difamación por parte de organizaciones políticas de derecha que crean un ambiente de intolerancia y de racismo entre ciudadanos italianos e inmigrantes.
Un reclamo a la justicia, porque se escucha con mucho énfasis y con vehemencia en las entrevistas televisivas y periodísticas subrayando il Rispeto delle regole a los inmigrantes, se les exige el cumplimiento a la ley; sólo que en forma contradictoria no se predica con el ejemplo, si no más bien con la viveza y el chantaje: Evasión tributaria, coimas en la buena pro de las construcciones, corrupción a la grande que los inmigrantes pensaban que esto sólo sucedia en su país de orígen, trabajo al negro, reciclaje de dinero. Cómo pedir respeto de las reglas?, cuando en los escándalos del mal Afare, son noticias internacionales. De todo esto el porcentaje de inmigrantes comprometidos será mínimo o igual a cero.
Una movilización pacífica contra de la ilegalidad, a favor y defensa de los derechos ciudadanos, del permiso de sogiorno en el tiempo establecido, de mayor tiempo de duración del permiso de residencia, para evitar las colas en la questura y los costos económicos que afectan al precario ingreso económico que se recibe, y un NO a los centros de identificación, que en su interno son más los ilegales que han vencido sus permisos de sogiorno que delincuentes comunes.
Será un sólo día y es posible que sea el inicio de un largo camino de lucha, de un movimiento que viene de lejos, pasa como un relámpago, pero en un instante deja encendida la luz de la justicia en cada conciencia de sus participantes, haciendo eco profundo en aquellos que por miedo no estuvierón presente.
Después del primero, todos continuaremos nuestra misma actividad en tiempos de crisis, contribuyendo siempre con el 10% del Producto Interno Lordo (PIL) y pagando más de 7 mil millones de euros al Inps. Alguién podrá decir fuerón pocos! Pero como decía César A. Vallejo: Son Pocos; Pero Son...!
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